Es importante buscar ayuda psicológica para evitar que se afecte la relación interpersonal y social De la Redacción de PD
Las parejas que no pueden tener hijos deben buscar ayuda psicológica para evitar que esta situación afecte su funcionamiento interpersonal y social, así como otros aspectos de su vida, incluyendo la salud emocional.
Así lo recomienda el doctor Luis A. Martínez Suárez, administrador de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA).
Según el funcionario, cuando una pareja confirma que existe un problema de infertilidad, por lo general, comienzan a suscitarse situaciones adversas. Sobre todo a nivel psicológico que, dependiendo de la estabilidad emocional de la pareja, su comunicación, sus expectativas, necesidades y proyecciones futuras, podrían afectar seriamente la relación sentimental. Leer mas
“Para una pareja que desea tener hijos y espera con ansias ese momento trascendental en sus vidas, el recibir la noticia de que no pueden procrear es como tirarle un balde de agua fría. Surgen sentimientos de angustia, tristeza, frustración, negación, coraje, desánimo, pérdida y culpa de la parte que presenta la dificultad para concebir”, advierte Martínez.
También destaca que la pareja puede enfrentar una crisis profunda o depresión. Y advierte que la experiencia de infertilidad es regularmente más estresante para la mujer que para el hombre, ya que el concepto de mujer y maternidad han estado tradicionalmente unidos.
“En el caso de las mujeres, muchas se sienten devaluadas, con sentimientos de vacío y la autoestima se afecta seriamente”, agrega el médico.
Mientras que en los hombres, la imposibilidad de embarazar a su pareja se relaciona, equivocadamente, con la masculinidad, por lo que se sienten presionados.
“Los hombres tienden a evitar las conversaciones acerca de su esterilidad, incluso con su propia pareja, provocando cierto grado de distanciamiento y una falta de comunicación entre ambos”, advierte Martínez, tras, aconsejar a la pareja que converse sobre la situación y expresen abiertamente sus sentimientos. Luego de conocer el diagnóstico, Martínez aconseja que la parejas identifique las alternativas disponibles, incluyendo la posibilidad de adopción o iniciar un tratamiento especializado.
También recomienda buscar ayuda psicológica en la toma de decisiones, así como para afrontar las posibles reacciones relacionadas con el problema de esterilidad o con otras áreas.
Además, es importante aprender técnicas de relajación para manejar el estrés, proyectarse al futuro, con o sin hijos, educarse sobre el tema y evitar pensamientos negativos.
Así lo recomienda el doctor Luis A. Martínez Suárez, administrador de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA).
Según el funcionario, cuando una pareja confirma que existe un problema de infertilidad, por lo general, comienzan a suscitarse situaciones adversas. Sobre todo a nivel psicológico que, dependiendo de la estabilidad emocional de la pareja, su comunicación, sus expectativas, necesidades y proyecciones futuras, podrían afectar seriamente la relación sentimental. Leer mas
“Para una pareja que desea tener hijos y espera con ansias ese momento trascendental en sus vidas, el recibir la noticia de que no pueden procrear es como tirarle un balde de agua fría. Surgen sentimientos de angustia, tristeza, frustración, negación, coraje, desánimo, pérdida y culpa de la parte que presenta la dificultad para concebir”, advierte Martínez.
También destaca que la pareja puede enfrentar una crisis profunda o depresión. Y advierte que la experiencia de infertilidad es regularmente más estresante para la mujer que para el hombre, ya que el concepto de mujer y maternidad han estado tradicionalmente unidos.
“En el caso de las mujeres, muchas se sienten devaluadas, con sentimientos de vacío y la autoestima se afecta seriamente”, agrega el médico.
Mientras que en los hombres, la imposibilidad de embarazar a su pareja se relaciona, equivocadamente, con la masculinidad, por lo que se sienten presionados.
“Los hombres tienden a evitar las conversaciones acerca de su esterilidad, incluso con su propia pareja, provocando cierto grado de distanciamiento y una falta de comunicación entre ambos”, advierte Martínez, tras, aconsejar a la pareja que converse sobre la situación y expresen abiertamente sus sentimientos. Luego de conocer el diagnóstico, Martínez aconseja que la parejas identifique las alternativas disponibles, incluyendo la posibilidad de adopción o iniciar un tratamiento especializado.
También recomienda buscar ayuda psicológica en la toma de decisiones, así como para afrontar las posibles reacciones relacionadas con el problema de esterilidad o con otras áreas.
Además, es importante aprender técnicas de relajación para manejar el estrés, proyectarse al futuro, con o sin hijos, educarse sobre el tema y evitar pensamientos negativos.
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