La política norteamericana vivió numerosos casos de amoríos con ruidosas consecuencias. La última, la renuncia de David Petraeus
1. Bill Clinton
En 1998 salió a la luz un affaire entre el entonces presidente y la pasante en la Casa Blanca Mónica Lewinsky. A pesar del escándalo producido, que obligó a Clinton a pedir disculpas públicamente, él y Hillary decidieron permanecer juntos.
En 1998 salió a la luz un affaire entre el entonces presidente y la pasante en la Casa Blanca Mónica Lewinsky. A pesar del escándalo producido, que obligó a Clinton a pedir disculpas públicamente, él y Hillary decidieron permanecer juntos.