Las seis mejores escuelas de samba de Brasil, que forman el llamado Grupo Especial, desfilaron por el Sambódromo. En Brasil se vivió la gran noche de Carnaval. Rio de Janeiro es el epicentro de los festejos que paralizan al país. Es un evento muy apasionante para los brasileños y extranjeros. Las seis mejores escuelas, que conforman la máxima categoría de competición, se lucieron en su jornada.En la previa, a la velada de música, baile, luces y colores, un ejército de obreros, electricistas, técnicos de sonido, personal de limpieza y encargados de abastecimiento trabajaron colectivamente en los detalles.
La escuela Uniao da Ilha homenajeó a Vinicius de Moraes, uno de los autores de la popular canción Garota de Ipanema, en el año en que se cumplen 100 años de su nacimiento. Y hasta Helo Pinheiro, de 68 años, la eterna garota de Ipanema que originó la canción.
Uniao da Ilha también contó con el actor Eriberto Leão, que desfiló como Tom Jobim, amigo de Vinicius y co-compositor de la famosa canción. Mientras, el cantante y compositor Toquinho se interpretó a sí mismo.
Alemania estuvo presente con su mitología del dios Thor, sus cuentos infantiles y juguetes como los Playmobil y sobre todo su cerveza: fueron homenajeados por la escuela Unidos da Tijuca, campeona de 2012 y de 2010.
La apertura del Sapucaí (sambodromo principal), la escuela Inocentes de Belford Roxo, elevada el año pasado a la primera división, que rindió homenaje a Corea del Sur en el cincuentenario de la inmigración coreana a Brasil.
Salgueiro, otra de las destacadas con sus tradicionales colores rojo y blanco, desfiló bajo el tema "Fama" y lo que significa ser célebre. Decenas de sus integrantes hicieron de estatuillas del Oscar, mientras centenas de percusionistas se disfrazaron de Che Guevara.
Los desfiles de las escuelas se preparan durante todo el año, y algunos cuestan hasta 5 millones de dólares. Las autoridades estiman que 6 millones de personas participan del carnaval de Rio, incluidos unos 900.000 turistas.
El templo de la samba a cielo abierto fue diseñado por el arquitecto Oscar Niemeyer. Allí las primeras seis escuelas de la primera división del carnaval, bailaron y cantaron a lo largo de 550 metros.
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