Los apuros, el estrés, los niños, la
dejadez...
Son muchas las razones por las que se deja de prestar la atención que se merece la persona con la que se convive por lo que la pareja entra en una dinámica de la que, a veces, es difícil salir.
Sin embargo, los expertos en la materia apuntan que a través de sencillos gestos espontáneos se consiguen grandes logros y un acercamiento en la relación mayor del que se puede uno imaginar.
Son muchas las razones por las que se deja de prestar la atención que se merece la persona con la que se convive por lo que la pareja entra en una dinámica de la que, a veces, es difícil salir.
Sin embargo, los expertos en la materia apuntan que a través de sencillos gestos espontáneos se consiguen grandes logros y un acercamiento en la relación mayor del que se puede uno imaginar.