La prueba definitiva del placer: ¿cómo saber si una persona es buena en la cama?

¿Cómo saber si un persona es buena en la cama? Si bien hay muchas respuestas que ofrece el cuerpo para determinar si todo marcha sobre ruedas entre los amantes, ¿cómo saber si todo es 100 por ciento real? Expertos en sexualidad coincidieron en que el enigma se resuelve respondiendo a una pregunta: ¿Hay curiosidad y confianza para hablar de sexo con la pareja entre las sábanas? Si la respuesta es afirmativa, se podría estar hablando de un amante ’diez’.



"Una de las grandes quejas de las mujeres es que sienten que el varón no se preocupa por ellas sino por su propio disfrute. Entonces, que la persona está ocupada en el disfrute del otro es un buen síntoma. Porque no sólo piensa en sí mismo", dijo la especialista en sexualidad Mariela Tesler.

Para el psicólogo y sexólogo Pedro Lucas Busto, de la Sociedad Española de Intervención en Sexología: "Lo correcto es hablar del ’buen amante".

"No hay señales o competencias universales que nos garanticen que somos buenos amantes, porque cada cuerpo y forma de entender el placer es diferente, pero hay una cosa común: el sexo hecho con autenticidad. Forzar nuestros movimientos como hemos visto en películas eróticas o leímos en internet puede alejarnos de lo que realmente nos gusta y nos pide el cuerpo. El buen amante es el que disfruta con lo que está haciendo", dijo el experto.

Para preocuparse de a dos, es fundamental que exista diálogo en la pareja. "No siempre tiene que ser verbal, ya que muchas personas dicen que eso les baja la libido; es por eso que puede recurrir a lo gestual, por ejemplo, para que el otro interprete la señal de que es por ahí", agregó Tesler.

La justa medida
Querer agradar y gustarle a la otra persona, muchas veces es tomado en exceso, y genera el efecto contrario.

Según los expertos, las personas preocupadas por si su pareja está satisfecha suelen tener dudas del tipo: ’¿soy lo suficientemente deseable y atractivo?’, ’¿estoy haciendo lo correcto?’. "Querer impresionar a la pareja y que se nos compare con una leyenda del sexo puede provocar el resultado contrario", advirtió el doctor Fernando Salas, cirujano experto en andrología y sexualidad masculina de España.

En ese aspecto, agregó Tesler: "No hay que preocuparse en exceso porque es posible que la cabeza juegue en contra. Está bueno dejarse llevar o como yo digo, distraer al distractor. Sobre todo las mujeres, que nos cuesta mucho conectarnos con el placer".

Claro que hay personas que tienen más capacidad para disfrutar y dar placer, y suelen ser aquellas que no temen a su cuerpo y que se sienten bien con ellos mismos. "Para dar placer lo primero es saber recibirlo. Es cuestión de autenticidad y espontaneidad", agregó Lucas Busto.

La prueba del placer

Tesler explicó que no todas las personas responden igual a los estímulos y es por eso, que nada está dicho a la hora del amor.

Una prueba de esto es un ejercicio que la especialista propone a las parejas que acuden a su consultorio: "Les hago hacer un ejercicio con una pluma y "tinta" -de chocolate comestible-. Y les pido a las mujeres que pongan un número del 1 al 4 en los lugares en donde quieren que su pareja explore".

Y continuó: "Cada mujer elige zonas completamente diferentes. Seguro mi ’uno’ sea el cuello y el de otra mujer sea la boca. Entendiendo esto, vemos que la pareja no es adivino y que es fundamental la comunicación".

Química entre los dos
La química no es menor. "La famosa piel es muy importante también. Están las famosas feromonas que todos producimos y que históricamente se sabe que la única propiedad que tienen es la de atracción. Entre los 20 y los 40 empiezan a decaer, al igual que con tanto uso de perfumes y fragancias desaparecen. Pero es muy común que el olor de una persona te atrape y es muy importante. Eso tiene que ver con esta famosa química, que es algo que no se ve pero que existe y por eso en el verano estamos más atractivos todos, porque emanan a través de la transpiración".

Para concluir, los expertos coincidieron en algo: "La fórmula más importante es preocuparse por el otro y tener seguridad en uno mismo".



Fuente: http://www.infobae.com