Errores comunes de madres primerizas

Errores comunes cuando enfrentas la llegada de ese primer bebé
Por: Emol
Ser mamá por primera vez es un mundo de descubrimientos donde es imposible no cometer errores. El pediatra Mauricio Yunge aconseja que las mamás- y los papás- “aprendan a tomarse descansos aunque sean cortos y seguidos, y que tengan una buena red de apoyo”.
La psicóloga Maribel Corcuera, por su parte, apela al instinto materno y a no improvisar la manera de cuidar a los niños. “Sintonízate con tu bebé y vas a saber lo que necesita”, afirma. A continuación, especialistas te cuentan qué evitar y cómo lograr la tranquilidad necesaria.
1. Abrigarlos excesivamente: Yunge, advierte que “cuando uno los abriga mucho se produce una alergia en la piel, la sudamina, porque el sudor los irrita y les enrojece”.
2. Bañarlos diariamente: No es necesario bañarlos todos los días. Un baño de larga duración podría resecar su piel. Sin embargo, el pediatra sostiene que “si el baño empieza a ser un momento grato para los padres y para el bebé, es bueno porque los relaja y prepara para un mejor sueño en la noche”. De lo contrario, se recomienda hacerlo dos veces por semana.
3. Que nadie se acerque: El miedo a que el bebé se contagie de una enfermedad o que salga lastimado, es común. “Pueden ir de visitas a otras casas siempre que no haya personas enfermas, teniendo especial cuidado con niños pequeños que son quienes pueden contagiar más a los recién nacidos”, explica Yunge.

4. Cortarles el pelo: El cabello de los bebés no es definitivo hasta después del primer mes, por lo que raparlos no hará que crezca más fuerte, como muchos piensan. “Es preferible cortarles el pelo más que pelarlos, pero importa poco porque el pelito va cambiándose sólo a partir del tercer mes, entonces no tiene mucho sentido, además de que el pelo tiene un rol protector para la cabecita”, dice Yunge.
5. Limpiarlo todo: La higiene es fundamental en los tres primeros meses de vida de los bebés, aunque después no es necesario extremar las medidas de limpieza ni esterilizarlo todo. El pediatra Yunge afirma que “no hay que ser obsesivos con el aseo ambiental. Basta limpiar con agua y jabón las mamaderas, y esterilizarlas una vez por día, por ejemplo”.

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