Ocho días después de recibir un balazo que le costó la vida, Héctor ‘Macho’ Camacho llegó anoche a Nueva York, donde sus restos recibirán sepultura el próximo lunes
Emotivo. María Matías, madre de Héctor ‘Macho’ Camacho, besa la frente de su hijo durante el velatorio. Arriba, a la derecha, Machito Camacho, ora frente al féretro de su padre. A la derecha, varios de los presentes le brindan el último adiós.
Por Luis Santiago Arce / elnuevodia.com
Parece que el ‘Macho Time’ será un espectáculo hasta su última morada en la Ciudad de los Rascacielos.
Ocho días después de recibir un balazo que le costó la vida, finalmente Héctor ‘Macho’ Camacho llegó anoche a Nueva York para ser sepultado, tras un par de emotivos y acalorados días de velatorio público en la Isla.
Las honras fúnebres locales terminaron ayer con una misa de recordación que casi termina como el “rosario de la aurora” al producirse una escaramuza que involucró al excampeón Wilfredo Vázquez, padre, al finalizar el acto en la capilla habilitada en la cancha Nilmarie Santini, en la sede central del Departamento de Recreación y Deportes (DRD) en Santurce.
Camacho, tetracampeón mundial de boxeo en tres categorías de organismos reconocidos, fue diagnosticado oficialmente con muerte cerebral el pasado jueves, dos días después de recibir un balazo mortal en Bayamón.
En medio de serias discrepancias familiares sobre el manejo del moribundo cuerpo, el ‘Macho Man’ finalmente fue desconectado de las máquinas de respiración artificial en la madrugada del sábado tras sufrir un segundo paro cardiaco en el Centro Médico de Río Piedras.
También se produjeron marcadas diferencias sobre el destino final del cadáver de Camacho. Su hijo mayor y también boxeador, Héctor ‘Machito’ Camacho, deseaba que fuera enterrado en Bayamón, municipio natal de su padre, pero doña María insistió en que el lecho mortal fuera en Nueva York.
El proceso reveló, asimismo, las agudas diferencias entre los padres del Macho, doña María y don Héctor, separados hace cuatro décadas, y conflictos de las andanzas románticas del destacado exmonarca, que provocaron anteayer una refriega entre una joven de Cataño, Cynthia Castillo, y féminas de la familia del boxeador.
Otro incidente
Para completar, una vez terminada la misa y mientras comenzaban a desalojar la cancha, se produjo un tumulto frente al ataúd cuando un allegado de Camacho, que se identificó como Jorge Lozada, alegadamente trató de abrirse paso con un empujón a la esposa de Vázquez, padre, Alice Lozada, quien intentaba acercarse para darle un saludo a doña María.
Al momento de salir del DRD también comenzaron a sonar sirenas de vehículos oficiales, al tiempo que decenas de seguidores tomaban fotos, grababan el momento y le ofrecían un sonoro aplauso de despedida.
Una vez en Nueva York, Camacho estará expuesto solamente hoy en la iglesia Santa Cecilia, de Manhattan, en la calle 106 entre las avenidas Park y Lexington, informó ayer el exmanejador y asesor del púgil, Ismael Leandry.
Entonces será sepultado este sábado en el cementerio St. Raymond's en el condado del Bronx. Desde anteayer se había informado que el velatorio neoyorquino sería jueves y viernes en Elcock Funeral Home de Richmond Hills.
Camacho, de 50 años de edad, fue baleado junto a un amigo de la infancia, Alberto Mojica Moreno, quien falleció en el acto. La investigación policiaca del incidente aún no ha finalizado.
Ocho días después de recibir un balazo que le costó la vida, finalmente Héctor ‘Macho’ Camacho llegó anoche a Nueva York para ser sepultado, tras un par de emotivos y acalorados días de velatorio público en la Isla.
Las honras fúnebres locales terminaron ayer con una misa de recordación que casi termina como el “rosario de la aurora” al producirse una escaramuza que involucró al excampeón Wilfredo Vázquez, padre, al finalizar el acto en la capilla habilitada en la cancha Nilmarie Santini, en la sede central del Departamento de Recreación y Deportes (DRD) en Santurce.
“Mi hijo se me fue, mi hijo está en el corazón”, declaró a llanto vivo la madre de Camacho, doña María Matías, al terminar el servicio religioso oficiado por el padre Luis Adorno, de la diócesis de Caguas, y solemnemente ambientado por el joven violinista Alejandro Manuel.
“Me lo mataron. No fue muerte natural, pero eso se lo dejo al que está allá arriba... Mi hijo se va amando a Puerto Rico. No puedo más”, concluyó la desconsolada progenitora.Camacho, tetracampeón mundial de boxeo en tres categorías de organismos reconocidos, fue diagnosticado oficialmente con muerte cerebral el pasado jueves, dos días después de recibir un balazo mortal en Bayamón.
En medio de serias discrepancias familiares sobre el manejo del moribundo cuerpo, el ‘Macho Man’ finalmente fue desconectado de las máquinas de respiración artificial en la madrugada del sábado tras sufrir un segundo paro cardiaco en el Centro Médico de Río Piedras.
También se produjeron marcadas diferencias sobre el destino final del cadáver de Camacho. Su hijo mayor y también boxeador, Héctor ‘Machito’ Camacho, deseaba que fuera enterrado en Bayamón, municipio natal de su padre, pero doña María insistió en que el lecho mortal fuera en Nueva York.
El proceso reveló, asimismo, las agudas diferencias entre los padres del Macho, doña María y don Héctor, separados hace cuatro décadas, y conflictos de las andanzas románticas del destacado exmonarca, que provocaron anteayer una refriega entre una joven de Cataño, Cynthia Castillo, y féminas de la familia del boxeador.
Otro incidente
Para completar, una vez terminada la misa y mientras comenzaban a desalojar la cancha, se produjo un tumulto frente al ataúd cuando un allegado de Camacho, que se identificó como Jorge Lozada, alegadamente trató de abrirse paso con un empujón a la esposa de Vázquez, padre, Alice Lozada, quien intentaba acercarse para darle un saludo a doña María.
Luego de ser separados por varias personas, Vázquez, padre, dijo que “cuando vi que estaba empujando a mi señora, tuve que meterme a defenderla. Ese tipo es un charlatán”. Lozada (Jorge), quien lució extremamente activo y vociferante desde el martes, aseguró que “todo está tranquilo. Ese tipo (Vázquez) es mi pana”.
A eso de la 1:30 p.m., al compás de los acordes de la música de Héctor Lavoe en las guaguas de sonido, finalmente el féretro de Camacho fue depositado en el coche fúnebre que lo transportaría escoltado por motoristas del municipio de Bayamón directo al aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín de Isla Verde, y de allí partiría anoche a eso de las 7:00 para llegar poco después de las 10:00 a la Gran Manzana.Al momento de salir del DRD también comenzaron a sonar sirenas de vehículos oficiales, al tiempo que decenas de seguidores tomaban fotos, grababan el momento y le ofrecían un sonoro aplauso de despedida.
Una vez en Nueva York, Camacho estará expuesto solamente hoy en la iglesia Santa Cecilia, de Manhattan, en la calle 106 entre las avenidas Park y Lexington, informó ayer el exmanejador y asesor del púgil, Ismael Leandry.
Entonces será sepultado este sábado en el cementerio St. Raymond's en el condado del Bronx. Desde anteayer se había informado que el velatorio neoyorquino sería jueves y viernes en Elcock Funeral Home de Richmond Hills.
Camacho, de 50 años de edad, fue baleado junto a un amigo de la infancia, Alberto Mojica Moreno, quien falleció en el acto. La investigación policiaca del incidente aún no ha finalizado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario