Según un estudio, hace más fieles a los hombres casados
La oxitocina también es considerada la hormona del apego.
Por ELNUEVODIA.COM
Un grupo de investigadores alemanes ha comprobado que la oxitocina hace más fieles a los hombres casados. La oxitocina es una hormona relacionada con los patrones sexuales que actúa también como neurotransmisor en el cerebro. Es producida por la mujer en forma natural durante el proceso del parto y por eso también se le conoce como la hormona del amor.
Según el estudio, publicado en Journal of Neuroscience y reseñada por la página de ABC, con esta hormona los varones comprometidos se mantienen más apegados a sus parejas y menos tentados por otras féminas.
Para determinar su función en las relaciones monógamas humana realizaron un estudio, a cargo de René Hurlemann, de la Universidad de Bonn, en el que administraban oxitocina o un placebo a través de un aerosol nasal a un grupo de hombres sanos y heterosexuales. Luego, se les presentaba una mujer atractiva para ver los efectos. A los hombres se les pidió que indicaran lo que consideraban una distancia ideal y cuándo les parecía incómoda.
Como parte de sus hallazgos encontraron que los casados o comprometidos que habían recibido la hormona preferían mantenerse a una mayor distancia de una guapa desconocida en comparación con aquellos que recibieron el placebo. Como dato curioso hallaron que no pasaba lo mismo con los solteros.
"Una investigación previa realizada con ratones de campo identificaba la oxitocina como clave principal para la fidelidad en animales", apunta Hurlemann. El nuevo estudio "nos proporciona la primera evidencia de que la oxitocina puede tener un papel similar en los humanos".
Según el estudio, publicado en Journal of Neuroscience y reseñada por la página de ABC, con esta hormona los varones comprometidos se mantienen más apegados a sus parejas y menos tentados por otras féminas.
Para determinar su función en las relaciones monógamas humana realizaron un estudio, a cargo de René Hurlemann, de la Universidad de Bonn, en el que administraban oxitocina o un placebo a través de un aerosol nasal a un grupo de hombres sanos y heterosexuales. Luego, se les presentaba una mujer atractiva para ver los efectos. A los hombres se les pidió que indicaran lo que consideraban una distancia ideal y cuándo les parecía incómoda.
Como parte de sus hallazgos encontraron que los casados o comprometidos que habían recibido la hormona preferían mantenerse a una mayor distancia de una guapa desconocida en comparación con aquellos que recibieron el placebo. Como dato curioso hallaron que no pasaba lo mismo con los solteros.
"Una investigación previa realizada con ratones de campo identificaba la oxitocina como clave principal para la fidelidad en animales", apunta Hurlemann. El nuevo estudio "nos proporciona la primera evidencia de que la oxitocina puede tener un papel similar en los humanos".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario