Un joven australiano logró escapar a la furia de las inundaciones que afectan a su país con la ayuda de una silenciosa amiga.
La situación no deja de ser vergonzosa, pero obtuvo el resultado esperado. Un joven australiano asediado por las inundaciones que castigan al país no tuvo mejor idea que flotar aferrado a una muñeca inflable.
Así fue hallado el adolescente de 19 años (también estaba acompañado por su novia) por los rescatistas del río Victoria.
Más de 30 personas murieron ya por las inundaciones en Australia.
Horsham, en el estado de Victoria, no había sufrido inundaciones tan graves en más de cien años. La ciudad, que se encuentra a mitad de camino entre Melbourne y Adelaida, tiene 14.000 habitantes.
Tras las graves inundaciones en Queensland y la costa noreste del país, que desataron la peor catástrofe natural de la historia de Australia, el agua sube ahora en el sureste.
El gobierno australiano no descarta crear un impuesto especial para financiar los daños millonarios de la catástrofe. “Sé que se necesitará mucho dinero y esfuerzo para la reconstrucción”, dijo la primera ministra, Julia Gillard.