A 11 metros de profundidad en el mar Caribe frente a Panamá, el alemán Rüdiger Koch, ingeniero aeroespacial de 59 años, lleva dos meses viviendo en una cápsula sumergida bajo una casa flotante futurista. Su objetivo es romper un récord Guinness al pasar 120 días bajo el agua sin despresurización, superando los 100 días alcanzados por Joseph Dituri. La cápsula de 30 m² cuenta con lo esencial: cama, televisor, internet satelital, energía solar, y una bicicleta estática. Koch, admirador de "20,000 Leguas de Viaje Submarino", disfruta de la tranquilidad marina y de la vista de peces desde sus ventanas circulares. El material de su vivienda es ecológico y fomenta la formación de corales.
Su experiencia es monitoreada constantemente, y recibe visitas médicas y alimentos. A pesar de los desafíos, como tormentas y aislamiento, Koch afirma estar cómodo y busca demostrar que la vida y el trabajo bajo el agua son posibles. Cuando finalice su hazaña, planea celebrar con una larga ducha. Fuente: Listin Diario
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