Por The Associated Press Philadelphia PA - El vendedor de marihuana que confesó haber matado a cuatro jóvenes en una granja en Pensilvania dice haber matado también a otras dos personas en Filadelfia, pero la Policía calificó esa aseveración de “sospechosa”.
Los detectives revisaron sus archivos para cotejar las declaraciones de Cosmo DiNardo, pero hasta ahora no han podido interrogarlo, dijo hoy el jefe policial de Filadelfia, Richard Ross.
"Tenemos que hablar con él directamente a fin de tener un punto de inicio", dijo Ross. "Depender de declaraciones de terceros es casi imposible”, agregó.
DiNardo, de 20 años, fue acusado la semana pasada de matar a cuatro hombres que estaban desaparecidos y cuyos restos fueron hallados en la granja familiar.
También dijo haber matado a un hombre y una mujer en Filadelfia hace años, pero que no sabe sus nombres, dijo Ross.
La Policía de Filadelfia dice que los detectives del condado Bucks siguen escudriñando los comentarios de DiNardo.
La Fiscalía local se abstuvo de comentar más allá de lo estipulado en el expediente policial, que no menciona a ninguna víctima de Filadelfia.
DiNardo confesó a las autoridades que atrajo a los cuatro hombres a la granja de 90 acres que tiene su familia, para allí matarlos, según el prontuario policial.
Uno de los hombres fue visto por última vez el 5 de julio, y los otros tres desaparecieron dos días después.
Los cuerpos de tres de las víctimas fueron arrojados en un tanque de combustible, rociados con gasolina y quemados, antes de ser enterrados a más de 12 pies de profundidad.
Las autoridades hallaron los restos de la cuarta víctima en una fosa aparte en una zona aislada de la granja, luego que DiNardo le dijo a la Policía dónde encontrarlo.
A cambio de esa información, la Fiscalía aceptó no pedir la pena de muerte.
Sean Kratz, de 20 años y primo de DiNardo, está también siendo procesado por tres de los asesinatos. Tanto él como DiNardo están en la cárcel sin derecho a fianza.
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