Además del reparto altruista, el niño gastó unos cientos de shékels en la compra de canicas y se mostró confundido al ser interrogado más tarde, cuando confesó, según indica un despacho de la agencia de noticias DPA.
La policía intervino en la escuela y pidió a los alumnos que vaciasen sus bolsillos y carteras hasta recuperar casi la totalidad del dinero, a excepción de unos 350 euros (más de 500 dólares), dijo la policía.
Medios israelíes hablaban del padre del niño responsable, que lloró de alegría tras recuperar el dinero.
Asi que los padres deberían tener más cuidado a la hora de guardar su dinero, no vaya a ser que pase lo mismo
Fuente: Agencia Andina