¡Adiós Viagra! Hola ondas sonoras para la erección

Por: BBCMUNDO Puede haber una alternativa a la “pastilla azul” que ha revolucionado la vida sexual de miles de hombres?  
Desde su introducción en 1998, el Viagra, nombre comercial de un compuesto llamado citrato de sildenafilo, ha sido uno de los tratamientos más populares para la disfunción eréctil, la imposibilidad de mantener una erección lo suficientemente firme para una relación sexual de penetración.


 El Viagra y otros medicamentos similares aumentan el flujo sanguíneo hacia el pene, pero estos fármacos son asociados a una larga lista de posibles efectos secundarios, que incluyen dolores de cabeza, mareos, náusea y pérdida de audición. 

 Un nuevo tratamiento que utiliza ondas sonoras puede lograr los mismos resultados que el Viagra sin los efectos secundarios, de acuerdo a estudios presentados este mes en el encuentro de la Sociedad Europea de Medicina Sexual, que tuvo lugar en Madrid, España.  

Un 57% recuperó la función eréctil

 La técnica utilizada en los estudios se llama “terapia extracorpórea de ondas de choque” (extracorporeal schockwaves therapy o ESWT, por sus siglas en inglés).

 Ondas sonoras de alta potencia ya vienen siendo utilizadas desde hace años por su capacidad de pulverizar cálculos de riñon, o para tratar otras patologías como calcificaciones en los tendones. La idea entonces, en el caso del pene, es usar la misma técnica pero con ondas de baja intensidad.  

Cinco cosas que cambiarán con el fin de la patente de Viagra

 En uno de los estudios, realizado por investigadores de Dinamarca y Reino Unido, las ondas de sonido fueron aplicadas a 112 hombres con disfunción eréctil.

 La mitad recibió ondas sonoras de baja intensidad dirigidas a seis puntos a lo largo del pene, en el que debe aplicarse un gel para facilitar la transmisión de las ondas. Se les administró cinco tratamientos durante cinco semanas y los resultados fueron monitoreados hasta seis meses después de la terapia.La otra mitad de los participantes recibió un placebo

Al comienzo del estudio, ninguno de los pacientes era capaz de tener una relación sexual de penetración sin fármacos. Pero al final del tratamiento, 57% de los hombres tratados con ondas de sonido lograron mantener una erección sin medicamentos. En el grupo que recibió el placebo, en cambio, sólo el 9% recuperó su función eréctil.