La cifra impresiona. Es que 30.000 restos aún aguardan a ser identificados. La Procaduría General de México (PGJ) trabaja sin descanso desde 2011, cuando se localizaron los fragmentos en un rancho de municipio de Salinas Victoria, en el estado de Nuevo Léon. El rancho donde se realizan las excavaciones se llama Las Abejas y se encuentra a 35 kilómetros de Monterrey, la capital de Nuevo León.
Según informó BBC Mundo, desde esa fecha han sido analizados por peritos de la fiscalía. La vocera de la PGJ, Priscila Rivas, admitió que hasta el momento se ha identificado el perfil genético de sólo 31 seres humanos.
"Durante esos cuatro años hasta ahorita se recolectaron poco más de 30.000 fragmentos óseos", explicó. "No son restos completos ni son 30.000 cuerpos, son fragmentos, te hablo de astillas milimétricas. Por eso se eleva hasta ese número".
La investigación busca desaparecidos, una figura cada vez más común en México. La organización civil Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos tiene el registro de al menos 960 personas desaparecidas en Nuevo León, aunque el número podría ser mayor, según su directora, Consuelo Morales.
En México, el número de desaparecidos es motivo de polémica. Según los datos oficiales, en el gobierno de Felipe Calderón hubo 29.707 desaparecidos, pero tras hacer una depuración, que incluyó visitas a familiares, se localizaron a 17.175 y aún no aparecen 12.532.
El gobierno de Peña Nieto tenía una lista de 23.234 desaparecidos entre el 1º de diciembre de 2012 y el 31 de julio de 2014. Sin embargo, 13.444 fueron localizadas y aún están desaparecidas 9.790.
No está claro cuántos de esos desaparecidos fueron secuestrados o asesinados por grupos del crimen organizado, que frecuentemente entierran a sus víctimas en fosas clandestinas, pero el Gobierno ha dicho que son múltiples las razones por las que alguien desaparece.