Ahora, Hogan admite que "estaba en el punto más bajo de mi vida, al punto de que quería quitarme la vida"
¿Estabas suicida?, le preguntó la reportera Amy Robach en entrevista para ABC News.
"Sí, lo estaba", contestó.
Reconoció que, "de todo lo que he pasado, esto es lo que probablemente me ha golpeado más duro".
Contó que se sintió destrozado cuando, a raíz del escándalo racial, la WWE borró toda su información de su página web. "Todo lo que hice en mi vida fue como si no hubiera pasado, como si nunca hubiera existido. ¡Fue devastador!", confesó.
Durante la entrevista, Hogan sollozó cuando habló sobre cómo su hija lo perdonó y lo apoyo en el proceso. "¿Podemos para por un minuto?", preguntó a la periodista en un momento porque no podía parar de llorar.
Por un lado, Hogan admitió que cometió un error con sus comentarios racistas. "Nunca debí haber dicho lo que dije. Estuvo mal. Estoy avergonzado", expresó.
Por otro lado, trató de justificarse. "Mucha gente tiene que entender que tú heredas cosas del ambiente, y donde yo crecí fue en el sur de Tampa, y fue un vecindario muy rudo, de muy bajos recursos. Todos mis amigos se saludaban con esa palabra ("nigger") como si fuera nada".
Sin embargo, pidió disculpa a sus fanáticos. "Oh Dios, por favor... ¡perdóname! Soy un tipo bueno. Sólo soy un hombre normal... No soy un racista", suplicó.