La mayoría de las familias tienen al menos un familiar difícil de tratar. Y en ocasiones esa persona suele ser con la que trabajamos. Y podemos pasar horas tratando de tener una solución a ¿cómo sacarle una sonrisa? O de menos evitar una mala cara. Las personas difíciles usualmente tienen baja autoestima y una necesidad de ejercer poder y control.
Puede que no seamos capaces de irnos de viaje con aquella persona, pero si todavía está en su vida, tu podrías minimizar las interacciones, para evitar situaciones incómodas.
* El primer paso sería crear distancia física, incluso si estás en la misma habitación. Asegúrate de que esté sentado tan lejos como sea posible, asegura la psicóloga australiana, Meredith Fuller.
* Dar espacio literal y figurado.
* El detenerse y decirle a la gente negativa, lo que piensas y quieres, puede ser un gran paso ya que por lo general simplemente no pueden manejar la situación.
* Si durante una plática, nos percatamos que el tema no funcionará, se recomienda poner fin inmediatamente a esa conversación.
* Si la persona se muestra enojada en primer lugar, vale la pena decirte a ti mismo que aquel ser tal vez solo está teniendo un mal día y que no es personal. Un nuevo estudio, ha encontrado que esto puede reducir el impacto de su agresión.
Aquí también tenemos otros tips:
1. Escucha lo que tengan que decir y no interrumpas, aunque no estés de acuerdo.
2. Asiente con la cabeza, y haz breves comentarios.
3. Pregunta. Formula preguntas que demuestren que has estado prestando atención.
Si no juzgamos y mostramos interés, es probable que conduzca a más confianza por parte de la persona difícil, recordemos que el 55% de la comunicación es el lenguaje corporal, el 38%es el tono de voz, y el 7% son las palabras reales que se hablan. Visto en: Muyinteresante.Mx