1. Las peceras son un lugar terrible para tener peces de colores. Son demasiado pequeñas para permitir filtrar el agua adecuadamente y no proporcionan oxígeno suficiente. Según TheGoldfishTank.com, “las peceras son el equivalente a poner tu pez en el inodoro y esperar que muestre sus mejores colores, crezca del tamaño de un pomelo y nunca se ponga enfermo”. (La misma regla se aplica a los peces luchadores).
2. Para que una aspirina te salve la vida durante un ataque al corazón, tienes que mascarla.
La aspirina, que inhibe las plaquetas que aceleran los coágulos de sangre, funcionan más rápido si se mastican. Solo hace falta una pequeña cantidad y, dado que el tiempo es esencial, mascarla produce el efecto antiplaquetas a través de los vasos sanguíneos de la boca, en vez de en el proceso digestivo.
3. Los antibióticos no actúan sobre los virus.
Los antibióticos matan solamente bacterias y son inútiles contra el resfriado y la fiebre, ambos causados por virus. Cuando no se usan correctamente, pueden resultar dañinos para la salud.
4. Frankenstein es el nombre del doctor, NO del monstruo.
5. Si todo el mundo baja la tapa en un inodoro portátil, el olor sale por el conducto que lleva hasta la parte superior.
Y el mal olor no se quedará dentro. Cuando el viendo sopla sobre el inodoro, crea un efecto de succión que hace que el olor salga.
6. La sangre no es azul dentro del cuerpo.
Es siempre de color rojo; parece azul debido a la forma en que la luz interactúa con la piel.
7. Las arañas de patas largas o fólcidos no son en realidad las arañas más venenosas del mundo.
Los fólcidos tienen colmillos parecidos a los de la loxosceles reclusa, lo cual puede explicar el mito extendido de que su veneno es fatal para los humanos. Las arañas no muerden de forma natural a los humanos, pero Adam Savage de "los cazadores de mitos" fue capaz de hacer que un fólcido penetrara su piel con una mordedura. Esta no le hizo nada más que sentir una “sensación de quemazón”.
8. Si enchufas los auriculares a la entrada del micrófono de tu portátil, funcionarán como micrófono.
9. Ahogarse no siempre es como uno se lo imagina.
Según el especialista en riesgo marítimo, Mario Vittone, es posible que se produzcan “muy pocas salpicaduras, que no se agiten las manos ni se grite ni se pida ayuda de ningún modo” cuando se de un ahogamiento.
10. En la Biblia, la fruta prohibida del jardín del Edén no era una manzana.
Génesis describe el fruto prohibido como “peri” una palabra hebrea que es un término genérico para “fruta”. Los eruditos han especulado que la fruta puede haber sido un higo, una uva, una granada, o incluso una nuez. La idea errónea de manzana puede haber venido después de que la Biblia fue traducida al latín, porque la palabra latina para “mal” malum, es similar a Malum, que es la palabra latina para “manzana".
11. La parte superior de la mayoría de los hornos se levanta par facilitar la limpieza.
¡Esto ayuda a prevenir incendios!
12. Los pterodáctilos no eran dinosaurios.
El término adecuado es en realidad “pterosaurio”, y técnicamente se trata de reptiles voladores, no dinosaurios.
13. Dar pan a los patos es peligroso.
Cualquier tipo de alimentación artificial de aves acuáticas provoca un exceso de bacterias fecales y una nutrición animal deficiente. Incluso afecta a los patrones migratorios. El pan blanco en particular distrae a los patos de su dieta sana natural y puede provocar enfermedades perjudiciales.
14. La mayoría de los coches tienen una flecha en la indicador del combustible que señala en qué lado del coche está el depósito.
