Estudios revelan que están dispuestos a tomar acciones más arriesgadas a la hora de conquistar
Para los expertos, muchos varones deben anteponer la cabeza antes que el corazón.
Por la Redacción de El Tiempo, Colombia / GDA
Lo sabemos desde los cuentos de hadas, cuando el flamante príncipe está dispuesto a enfrentarse al peligroso dragón por el amor de la bella princesa. Evidentemente en un mundo como el de hoy tal osadía no es cuento de todos los días, pero en un estudio realizado por la plataforma de contenido Taylor & Francis, tal comportamiento no es solo una ficción sino que, los hombres sí están dispuestos a esforzarse más cuando se trata del amor de una mujer.
El estudio se realizó en torno a los comportamientos de alto riesgo tales como pruebas automovilísticas, juegos de azar, deportes extremos y consumo en exceso de alcohol entre otras, y demostró que, cuando hay un motivo romántico y -sobre todo reproductivo- detrás, los hombres toman acciones mucho más osadas que las mujeres mientras que en las mujeres prima el instinto de autoprotección.
Sí, los hombres son más arriesgados que ellas, pero esto no necesariamente es positivo. Al analizarse desde el punto de vista social y económico, cifras tales como accidentes automovilísticos, muertes por consumo elevando de alcohol o cigarrillo o tendencias a caer en los excesos del juego, tienen repercusiones costosas tanto para los individuos como para la sociedad en conjunto. En conclusión, es la población de hombres jóvenes quienes deben anteponer la cabeza antes que el corazón a la hora de tomar decisiones de alto riesgo por el amor de una mujer.
El estudio se realizó en torno a los comportamientos de alto riesgo tales como pruebas automovilísticas, juegos de azar, deportes extremos y consumo en exceso de alcohol entre otras, y demostró que, cuando hay un motivo romántico y -sobre todo reproductivo- detrás, los hombres toman acciones mucho más osadas que las mujeres mientras que en las mujeres prima el instinto de autoprotección.
Sí, los hombres son más arriesgados que ellas, pero esto no necesariamente es positivo. Al analizarse desde el punto de vista social y económico, cifras tales como accidentes automovilísticos, muertes por consumo elevando de alcohol o cigarrillo o tendencias a caer en los excesos del juego, tienen repercusiones costosas tanto para los individuos como para la sociedad en conjunto. En conclusión, es la población de hombres jóvenes quienes deben anteponer la cabeza antes que el corazón a la hora de tomar decisiones de alto riesgo por el amor de una mujer.
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