Por Liz Sandra Santiago / elnuevodia.com/ (Fuente: Carlos Sosa, psicólogo)
Para muchas personas, nunca es tarde para comenzar o fortalecer una relación de pareja. Hace dos años que Luisa y Oscar dejaron a sus hijos las riendas del pequeño negocio familiar.
Ella tenía 56 años y el 58 cuando decidieron que había llegado el momento de disfrutar de tiempo libre, de viajes y de una relación de pareja que habían dejado a un lado por sus carreras profesionales y la crianza de los hijos.
Aunque pensaron que sería una transición fácil, cuando “se volvieron a encontrar”, esta vez solos y con todo su tiempo libre tuvieron que pasar por un proceso de adaptación.
“Siempre pensaba en el retiro como esa gran meta. Planificaba estar viajando todo el tiempo y disfrutar de todo aquello que me había perdido cuando trabajaba más de ocho horas al día y llegaba a la casa a atender a mis hijos. Pero la realidad fue diferente. No me había dado cuenta que mi relación con Oscar se había deteriorado y que apenas hablábamos de nosotros. Fue un periodo difícil, pero decidimos enamorarnos otra vez”, cuenta Luisa.
Fue entonces cuando comenzaron las citas a cenar, al cine, a viajes de fines de semana y a caminar por el Viejo San Juan.
Según el psicólogo Carlos Sosa, esta situación es muy común en parejas que han convivido por mucho tiempo y que se han dedicado por completo al trabajo y a la crianza de los hijos.
“Para una pareja que haya estado centrada en los hijos y todas las actividades hayan girado en torno a esto, cuando se encuentran de nuevo experimentan el fenómeno del nido vacío y trae como resultado un sentimiento de soledad. Algunas parejas se dan cuenta que no se aman como al principio y optan por la separación, mientras que otras se dan una nueva oportunidad”, explica Sosa.
Para los que optan por intentarlo otra vez, esta etapa puede resultar muy interesante porque comienzan a identificarse el uno con el otro, a conocerse otra vez teniendo el tiempo para compartir sus gustos y sus metas. Algunos tienen los recursos para irse a viajar libremente y disfrutar de actividades que antes no solían realizar.
“Las relaciones interpersonales son bien significativas en este momento de la vida. Es muy importante que las personas cuenten con un apoyo para ajustarse a una etapa de cambios que tiene que ver con apariencia y capacidad física”, finaliza Sosa.
Disfruta en pareja
• Es importante que ambos mantengan una actitud positiva y de apertura ante esta etapa de la vida en la que vuelven a disfrutar de tiempo a solas, pero esta vez con más madurez y experiencias de vida.
• Si encuentras a tu alma gemela en la tercera edad, no le cierres las puertas. Vive al máximo la experiencia.
• Recuerda que si tienes la oportunidad y el deseo de mantener una relación de pareja, no hay nada que te impida disfrutar del amor.
(Fuente: Carlos Sosa, psicólogo)
Ella tenía 56 años y el 58 cuando decidieron que había llegado el momento de disfrutar de tiempo libre, de viajes y de una relación de pareja que habían dejado a un lado por sus carreras profesionales y la crianza de los hijos.
Aunque pensaron que sería una transición fácil, cuando “se volvieron a encontrar”, esta vez solos y con todo su tiempo libre tuvieron que pasar por un proceso de adaptación.
“Siempre pensaba en el retiro como esa gran meta. Planificaba estar viajando todo el tiempo y disfrutar de todo aquello que me había perdido cuando trabajaba más de ocho horas al día y llegaba a la casa a atender a mis hijos. Pero la realidad fue diferente. No me había dado cuenta que mi relación con Oscar se había deteriorado y que apenas hablábamos de nosotros. Fue un periodo difícil, pero decidimos enamorarnos otra vez”, cuenta Luisa.
Fue entonces cuando comenzaron las citas a cenar, al cine, a viajes de fines de semana y a caminar por el Viejo San Juan.
Según el psicólogo Carlos Sosa, esta situación es muy común en parejas que han convivido por mucho tiempo y que se han dedicado por completo al trabajo y a la crianza de los hijos.
“Para una pareja que haya estado centrada en los hijos y todas las actividades hayan girado en torno a esto, cuando se encuentran de nuevo experimentan el fenómeno del nido vacío y trae como resultado un sentimiento de soledad. Algunas parejas se dan cuenta que no se aman como al principio y optan por la separación, mientras que otras se dan una nueva oportunidad”, explica Sosa.
Para los que optan por intentarlo otra vez, esta etapa puede resultar muy interesante porque comienzan a identificarse el uno con el otro, a conocerse otra vez teniendo el tiempo para compartir sus gustos y sus metas. Algunos tienen los recursos para irse a viajar libremente y disfrutar de actividades que antes no solían realizar.
“Las relaciones interpersonales son bien significativas en este momento de la vida. Es muy importante que las personas cuenten con un apoyo para ajustarse a una etapa de cambios que tiene que ver con apariencia y capacidad física”, finaliza Sosa.
Disfruta en pareja
• Es importante que ambos mantengan una actitud positiva y de apertura ante esta etapa de la vida en la que vuelven a disfrutar de tiempo a solas, pero esta vez con más madurez y experiencias de vida.
• Si encuentras a tu alma gemela en la tercera edad, no le cierres las puertas. Vive al máximo la experiencia.
• Recuerda que si tienes la oportunidad y el deseo de mantener una relación de pareja, no hay nada que te impida disfrutar del amor.
(Fuente: Carlos Sosa, psicólogo)
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