La mayor cantidad de interesados viene de Estados Unidos mismo, con 20,3%, India con 10,5% y Australia con 6% de los requerimientos para instalarse en el barco. La idea es alojar a alrededor de 1.000 emprendedores en la cubierta, y los costos de vivir ahí estarían entre los USD$1.200 y USD3.000 mensuales por persona, lo que le daría acceso también a espacio para instalar su oficina y su casa.
Aparentemente el plan es rehacer un crucero usado para turismo, y convertirlo en esta “isla”. Como el barco está en aguas internacionales, no está sometido a las leyes de EE.UU. y sus habitantes no necesitarán obtener una visa para vivir ahí, como sí ocurre en el continente. Según Blueseed, muchas personas talentosas se ven forzadas a volver a sus países por no conseguir estos papeles, cosa que se evitaría estando en el barco.
La idea es que una vez que los emprendimientos hayan madurado, puedan instalarse como empresas en Silicon Valley, abandonando la incubadora flotante.
Link: Pirate island attracts more than 100 startup tenants (The Register)
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