¿Libres de prejuicios raciales? Por Renata Rincón / El Tiempo
La primera vez que los matrimonios interraciales ocuparon los titulares en Estados Unidos fue por la comedia ‘Adivina quién viene esta noche’, una película de 1967 en la que la protagonista, Joanna Drayton (Katharine Houghton), llega a casa acompañada por el médico afroamericano John Prentice (Sidney Poitier), y les anuncia a sus padres que se casarán. Aunque la familia es liberal y no tiene prejuicios raciales, el padre de Joanna cree que un matrimonio como éste fracasará debido a la presión social.
Pues bien, aunque esta presión social sigue existiendo en pleno 2011, lo cierto es que las encuestas hechas por Gallup en los últimos 50 años muestran que las cosas han cambiado radicalmente. Cuando se preguntó en 1958 sobre estos matrimonios interraciales, solamente el cuatro por ciento de los estadounidenses los aprobaba. Diez años más tarde, la cifra aumentó al 20 por ciento. Hacia 1983, más de la mitad aún desaprobaba las uniones entre ambas razas pero, en el sondeo más reciente, publicado hace un mes en conjunto con el periódico USA Today, la cifra de aprobación aumentó al 86 por ciento.
Esto quiere decir que solamente un 14 por ciento de los estadounidenses se resiste a ver estos matrimonios como algo normal y, un dato que no se puede pasar por alto, es que son los blancos quienes presentan la mayor resistencia a romper con este tabú. Hacia finales de la década de los sesenta, más del 50 por ciento de los negros apoyaba estas uniones, mientras que menos de un blanco por cada cinco lo hacía. Actualmente, el 96 por ciento de los afroamericanos las aceptan, frente a un 84 por ciento de los blancos.
A pesar de que no se ha estudiado con mayor detalle el cambio de opinión de la sociedad al respecto, lo cierto es que en la más reciente encuesta no muestra nada que requiera especialistas que la expliquen pues los más cerrados a la idea de las uniones interraciales pertenecen a los grupos de personas que, por lo general, se resisten a romper con tabúes: las mayores de 65 años, las de bajos niveles de educación (bachillerato o menos), las conservadoras y las republicanas.
Tal vez la resistencia de los mayores es algo directamente relacionado con la época en la que vivieron, pues hace cinco décadas las uniones entre blancos y negros en matrimonio no solo eran un tabú, sino que eran prohibidas por la ley en 16 estados, algo que en 1967 la Corte Suprema declaró inconstitucional.
¿Más negros con blancas o blancos con negras?De acuerdo con el estudio publicado en la edición de octubre de la revista Journal of Marriage and Family, el número de matrimonios entre blancos y negros ha aumentado drásticamente. Zhenchao Qian, profesor de sociología que dirigió la investigación, basada en datos recogidos entre 1980 y 2008, explicó que mientras 5 por ciento de los hombres negros se casaba con una mujer blanca en 1980, el porcentaje se elevó a 14 por ciento en 2008. En mujeres negras contrayendo matrimonio con un hombre blanco, la proporción era de 1 por ciento en 1980, frente a 6 por ciento en 2008.
Pues bien, aunque esta presión social sigue existiendo en pleno 2011, lo cierto es que las encuestas hechas por Gallup en los últimos 50 años muestran que las cosas han cambiado radicalmente. Cuando se preguntó en 1958 sobre estos matrimonios interraciales, solamente el cuatro por ciento de los estadounidenses los aprobaba. Diez años más tarde, la cifra aumentó al 20 por ciento. Hacia 1983, más de la mitad aún desaprobaba las uniones entre ambas razas pero, en el sondeo más reciente, publicado hace un mes en conjunto con el periódico USA Today, la cifra de aprobación aumentó al 86 por ciento.
Esto quiere decir que solamente un 14 por ciento de los estadounidenses se resiste a ver estos matrimonios como algo normal y, un dato que no se puede pasar por alto, es que son los blancos quienes presentan la mayor resistencia a romper con este tabú. Hacia finales de la década de los sesenta, más del 50 por ciento de los negros apoyaba estas uniones, mientras que menos de un blanco por cada cinco lo hacía. Actualmente, el 96 por ciento de los afroamericanos las aceptan, frente a un 84 por ciento de los blancos.
A pesar de que no se ha estudiado con mayor detalle el cambio de opinión de la sociedad al respecto, lo cierto es que en la más reciente encuesta no muestra nada que requiera especialistas que la expliquen pues los más cerrados a la idea de las uniones interraciales pertenecen a los grupos de personas que, por lo general, se resisten a romper con tabúes: las mayores de 65 años, las de bajos niveles de educación (bachillerato o menos), las conservadoras y las republicanas.
Tal vez la resistencia de los mayores es algo directamente relacionado con la época en la que vivieron, pues hace cinco décadas las uniones entre blancos y negros en matrimonio no solo eran un tabú, sino que eran prohibidas por la ley en 16 estados, algo que en 1967 la Corte Suprema declaró inconstitucional.
¿Más negros con blancas o blancos con negras?De acuerdo con el estudio publicado en la edición de octubre de la revista Journal of Marriage and Family, el número de matrimonios entre blancos y negros ha aumentado drásticamente. Zhenchao Qian, profesor de sociología que dirigió la investigación, basada en datos recogidos entre 1980 y 2008, explicó que mientras 5 por ciento de los hombres negros se casaba con una mujer blanca en 1980, el porcentaje se elevó a 14 por ciento en 2008. En mujeres negras contrayendo matrimonio con un hombre blanco, la proporción era de 1 por ciento en 1980, frente a 6 por ciento en 2008.
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