Tras la incautación, a través de la frecuencia de radio se registraron amenazas de muerte contra agentes de la Policía Municipal y al respecto el comandante militar advirtió que están preparados para cualquier ataque TIJUANA. Elementos de las policías Estatal y Municipal, en coordinación con el Ejército mexicano, incautaron unas 105 toneladas de mariguana, en un operativo que inició ayer en la madrugada y concluyó horas después.
El comandante de la segunda zona militar, Alfonso Duarte Múgica, confirmó el decomiso de la droga que se hallaba envuelta en 10 mil paquetes que tenían diferentes inscripciones, y explicó que es el mayor logro en los últimos tres años en Baja California.
Según los primeros cálculos, la droga habría podido venderse en México en unas 210 millones de dosis o en 4 mil 200 millones de pesos. En Estados Unidos el costo podría duplicarse y hasta triplicarse, dijo el jefe militar.
Once presuntos traficantes fueron detenidos en las acciones que se llevaron a cabo en un predio del Arroyo Alamar del ejido Chilpancingo, en delegación Mesa de Otay; en el fraccionamiento El Soler, delegación Playas de Tijuana, y en una vivienda ubicada en Playas de Rosarito.
Tras la incautación, a través de la frecuencia de radio se registraron amenazas de muerte contra agentes de la Policía Municipal y al respecto el comandante militar advirtió que están preparados para cualquier ataque.
El secretario de Seguridad Pública Municipal, Julián Leyzaola Pérez, descartó algún cambio en los operativos de esa corporación.
Duarte Múgica explicó que los agentes locales detectaron un convoy con hombres sospechosos, por lo que intentaron interceptarlos y como resultado, los tripulantes dispararon contra ellos, con resultado de un policía herido y un agresor lesionado.
El Ejército mexicano y la Policía Estatal Preventiva apoyaron el operativo de detención e investigación, con lo que se ubicó un domicilio en Arroyo Alamar y después los otros donde estaba el resto de la mariguana.
Los 10 mil paquetes estaban envueltos en paquetes de diversos colores, incluso tenían inscripciones como “inge”, “yoyo”, “perro”, “zorro”, “cap”, “pony”, “dálmata”, “ram’s”, “lobo”, una estrella, un rostro y hasta calcomanías de caricaturas.
Duarte Múgica explicó que hasta el momento se desconoce a cuál grupo criminal pertenecía la droga, pero advirtió que el decomiso representa un golpe contundente a la estructura financiera del delito organizado.
El comandante señaló que por las evidencias obtenidas al momento es muy probable que el enervante llegó a Baja California por las diferentes vías procedente del sur del país, y fraccionado en vehículos pequeños fue llevado a las bodegas.
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