Según sostiene el portal, Lohan dio positivo en un control antidroga realizado la semana pasada.
Los términos de su libertad condicional reflejan que la intérprete pasaría 30 días en prisión si volvía a dar positivo en uno de estos análisis.
Un juez de la Corte Superior de Los Ángeles ordenó que la actriz debía asistir a clases educativas sobre sus adicciones, llevar a cabo múltiples sesiones de psicoterapia hasta el mes de noviembre y someterse a frecuentes controles antidroga.
Una fuente cercana a la artista dijo a TMZ: "La gente con problemas de adicciones no mejora de forma mágica, y ella realmente se ha esforzado para mejorar la situación".
El entorno de la actriz asegura que la información es falsa, pero el portal dice haber contrastado los datos.
Una portavoz del fiscal del distrito de Los Ángeles, Sandi Gibbons, dijo al portal que su oficina no había sido "notificada oficialmente" de los resultados del control y que no se ha establecido una fecha para la cita judicial.
Lohan ingresó en la cárcel en julio tras violar los términos de la libertad condicional que le fue impuesta por conducir en estado de embriaguez en 2007.
Este tratamiento forma parte de un programa de rehabilitación que deberá completar sin necesidad de ingresar en un centro médico, como en el que estuvo durante 23 días en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
Lohan salió del centro médico Ronald Reagan de UCLA a finales de agosto tras haber ingresado a comienzos de mes.
Previamente cumplió 13 de los 90 días de cárcel que recibió como sentencia por conducir en estado de embriaguez en 2007.
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