Mientras más escandalosa su campaña, más popular es Trump


Por: Pilar Marrero
El magnate Donald Trump lanzó su candidatura presidencial a mediados de junio y tres semanas después ya estaba en la delantera de las primarias de su partido, aunque por pocos puntos sobre el supuesto favorito del partido, Jeb Bush. 


Desde entonces han sido muchos los escándalos, los encontronazos y los insultos que Trump ha lanzado contra mujeres, veteranos (el senador John McCain) y periodistas (Megyn Kelly, de Fox y Jorge Ramos, de Univisión). 

Su “plan de inmigración”, que llama a deportar, deportar y deportar, aparte de construir muros y sancionar a México sigue siendo el único punto de su plataforma publicado en su página web. 

 Ha ido a la frontera y ha mandado a callar a José Díaz Balart de Telemundo, ha llamado “un tipo sin energía” a Jeb Bush y ha dicho que “el sueño americano está muerto”. Cualquiera de esos escándalos podría haber acabado con un candidato más débil. Pero Trump no ha hecho más que subir en las encuestas, volverse más popular, ganar más seguidores y lograr enormes ratings.